A juzgar por todas las discusiones que hay sobre la participación de los empleados hoy en día, uno podía pensar que el capital humano se siente mejor en sus trabajos. Los hechos niegan esta realidad ya que menos del 30% de los empleados se sienten implicados en su trabajo. Este concepto se refiere a que los empleados quieren trabajar en un entorno que no solo sea entretenido, sino que satisfaga sus metas profesionales, sea significativo para ellos y les deje con una sensación de control.
He aquí por qué debería potenciar a los empleados en su negocio:
1. Mayor Devoción por la Empresa
¿Recuerda como en la escuela había clases que disfrutaba y otras que no? Hablando por mi propia experiencia, las clases que me gustaban eran aquellas en que me sentía en control, donde podía expresarme en voz alta y mi opinión importaba, e incluso aunque no fueran mi asignatura predilecta, me daban espacio para crecer. Las clases que no me gustaban tenían profesores que estaban siempre buscando la manera de dañar mi imagen, o de humillar a los alumnos, o de hacerles sentir rechazados.
Los mismos principios se aplican en nuestro caso. Si sus empleados se sienten en control, querrán estar en la empresa, y desearán trabajar para que prospere, no solo porque les pagan por ello, sino porque disfrutan de estar allí y porque les llena de otras maneras.
2. Mayor Generación de Ideas
Un empleado en control no se sentirá como un rostro anónimo más. Sentirá que puede hablar claro y aportar sus ideas. Y esto es sencillamente genial para usted como empresario porque algunas de sus mejores ideas proceden de los que mejor conocen su empresa.
Alguien me contó en una ocasión como fue denigrado cuando dos superiores estaban hablando entre ellos sobre la posibilidad de vender su aplicación a una compañía más grande. Cuando mi amigo intervino, le respondieron con un cortante “Continúa con tu trabajo.” Otra manera de decir “Métete en tus asuntos”.
Pero es que el asunto de alguien que trabaja en una compañía es mejorar esa compañía. El narrador de esta historia tenía una conexión obvia con la compañía a la que pensaban vender. Cuando los superiores despreciaron su aportación, perdieron también otras posibles ideas que llegarían con el tiempo y que ese empleado ya no tendría la confianza de compartir. Este es un ejemplo de cómo ciertos comportamientos sirven para debilitar la posición de sus empleados.
3. Concéntrese en el Panorama a Largo Plazo
Una de mis historias favoritas de participación laboral es la del conserje que trabajaba en la NASA. Cuando el presidente Kennedy le preguntó cuál era su posición en la compañía, él contestó: “Estoy ayudando a llevar un hombre a la luna.”
Este es el tipo de potenciación al que me refiero. Este hombre, sin importar el tamaño de su cargo, se daba cuenta de que era parte de algo más grande a lo que él aportaba su grano de arena. Este es el tipo de potenciación que crea los mejores equipos y que, en definitiva, lleva a una compañía al éxito.
Así que ahí lo tiene. Un empleado en control es un empleado entregado a su trabajo. Un empleado que se siente en control toma mejores decisiones, y se esfuerza más allá de su papel, pensando no solo en sí mismo, sino en la compañía.
